sábado, 26 de mayo de 2012

Algún día viviré en una gran ciudad, donde no se distingan caras y todo mi amor propio rebose en todos los estúpidos sombreros que me compré después de dejarte.
Algún día viviré en una gran ciudad, donde las miradas se pierden y el odio es efímero. Estaré fumándome tus ganas de hundirme la autoestima.
Algún día viviré en una gran ciudad, donde los edificios sobresalen con orgullo, y las desgastadas escaleras de mi casa solo servirán para hablar de buenos momentos de madrugada.
Algún día viviré en una gran ciudad, donde la gente no se disculpa al empujarte en el metro, y cada noche beberé cervezas que ya no me sabrán a ti.

¿Te lo he dicho ya? Algún día viviré en una gran ciudad.
Y tu no estarás.

2 comentarios:

Seguidores